Fotógrafo. Nagoya, Japón
Tomoyuki Hotta (Nagoya, Japón) es fotógrafo y, desde que llegó a España, no hace más que sorprendernos. Lleva más de 40 años compartiendo su particular visión. “El mundo nos muestra cada día multitud de luces y sombras. Capturar el momento exacto y trasmitir la grandeza oculta en lo cotidiano se ha convertido en una obsesión. Por la calle, en casa, en momentos crudos, alegres e incluso en los más aburridos, quedo atrapado por el objetivo de mi cámara.”
Hotta ha afinado su mirada como un instrumento siempre listo para tocar la nota correcta. Sus fotos pueden capturar en una fracción de segundo toda una vida resumida en un rostro. Transmite la sensibilidad del momento vivido y la confianza necesaria a los retratados para ser captados por su objetivo escondido tras el ala de su sombrero.
Mientras que algunos tratan de mostrar las miserias, Tomoyuki prefiere mostrar el impulso vital que mueve el mundo y que perdura a nuestra alrededor para quienes tienen ojos para ver.
Reside en Algeciras y ha protagonizado exposiciones sobre su particular visión de este municipio gaditano.
El amor y la fotografía ataron al japonés al Campo de Gibraltar. «En Tokio todo el mundo caminaba con prisa y era difícil parar a la gente por la calle para pedirles una foto».